Su vida
Emmanuel Mounier nace en Grenoble (Francia) el 1 de Abril de 1905. Poseía una salud frágil ya que a los trece años pierde visión en un ojo tras un golpe, además de ser sordo de un oído desde su nacimiento.
Cursó sus estudios de filosofía durante 3 años en su ciudad natal donde se licenció (1927). Estudió a Charles Peguy, lo que le descubrió un camino místico al que se entregó radicalmente. En Octubre de 1932 nace la revista Esprit, de la cual Mounier es uno de sus fundadores y director. En esta revista Mounier realiza una inmensa labor de revolución personalista y comunitaria, creando alrededor de la revista una comunidad de vida y pensamiento.
En 1935 se casa con Paulette Leclercq, con quien tuvo tres hijas. La forma de afrontar la enfermedad y muerte de una de ellas (Françoise) en su niñez nos demuestra la fe de este gran hombre. Vivió este acontecimiento desde la felicidad en el dolor y reconociendo la inmensa gracia que reinó en aquellos días (nada se parece más a Cristo que la inocencia sufriente, decía).
Durante la segunda guerra mundial Esprit comienza a ser censurada, y en 1942 Mounier va a la cárcel durante unos 10 meses, volviendo a ir varias veces tras ser liberado. Protagonizó una huelga de hambre por la que consiguió salir de prisión. A los 45 años, en 1950, murió.
Su pensamiento
Mounier difundió el Personalismo Comunitario. Esta filosofía de la vida pone a la persona en comunidad como centro de todo. Las siguientes afirmaciones nos darán una idea de su pensamiento:
- “La vida personal comienza con la capacidad de romper el contacto con el medio, de recuperarse, para unificarse”.
- “Actuaremos por lo que somos más que por lo que haremos o diremos”.
- “Nuestra acción no está esencialmente orientada al éxito sino al testimonio”.
- “Aunque estuviéramos seguros del fracaso, nos pondríamos en marcha de todas formas, porque el silencio se ha convertido en intolerable”.
- “No basta con comprender, hay que actuar”.
- “El acontecimiento será nuestro maestro interior”.
- “La Revolución será personal o no será, a su vez será comunitaria o no será”.
- “La persona solo retrocede para saltar mejor”.
- “La acción debe nacer de la sobreabundancia de silencio interior”.
En clave personalista y comunitaria
El testimonio de vida de Mounier es luz para nuestro tiempo, necesitado de una revolución personalista y comunitaria como la que él soñó y para la que él trabajó incesantemente. Que cada hombre se atreva a penetrar en su interior, a conocer su verdad, a descubrir su fuerza personal, para así transformar la sociedad y construir una comunidad humana solidaria y fraterna. Para ello será necesario reconocer que el otro no es un límite para la libertad de la persona, pues la libertad sólo se realiza en la relación amorosa entre el yo y el tú. El otro no es mi enemigo, sino mi compañero de viaje, aquel con quien estoy llamado a vivir en armonía.
Si quieres saber más…
Te recomendamos la biografía de Emmanuel Mounier publicada por el IEM en la colección sinergia, escrita por Carlos Díaz.